No soy un fan absoluto del género de los shooters en primera persona y la verdad es que, salvo algunas excepciones como la saga Halo o Bioshock y algún que otro Call of Duty en su modo campaña, poco he jugado de este género en los últimos tiempos.
Tras el anuncio de Doom y ver varios vídeos del juego sentí algo de curiosidad, ya que me hacía gracia el jugar a un FPS a la antigua usanza de aquellos en los que no te reponen la vida o los escudos de gratis, de aquellos en que te lo tienes que currar para avanzar, de aquellos en los que la exploración es importante y la verdad, Doom me ha hecho recordar esas sensaciones aderezadas con una jugabilidad furiosa en la que te sientes el puto amo liquidando demonios a diestro y siniestro.
Pero vamos por partes, empezamos despertando en una especie de laboratorio, dentro de una armadura en lo que parece haber sido un lugar en el que se ha realizado un rito satánico. Pronto descubriremos que estamos en Marte y ha habido un accidente en el que se ha abierto el portal del mundo de los demonios y estos han acabado con prácticamente todo ser viviente que poblaba la colonia industrial en la que estamos. En dicho lugar averiguaremos que se ha estado jugando con una peligrosa energía que nos vincula con el mundo demoníaco e incluso se ha experimentado para crear armas vivientes, una locura a nivel argumental digna de un genio del mal que nos ofrecerá momentos de lo más variopinto.
A nivel jugable nos encontramos con un juego de acción puro y duro con grandes dosis de exploración para buscar secretos y elementos rpg la mar de interesantes.
Comenzando un poco a destripar el nuevo Doom, lo primero que llama la atención es la agilidad del personaje, que goza de una velocidad increíble y es capaz de agarrarse a los salientes para alcanzar puntos más altos del mapeado. Al ir avanzando incluso conseguiremos un doble salto que hace el juego más dinámico aún si cabe.
Al igual que en anteriores entregas tenemos una barra de vida y otra de escudo que podemos mejorar al ir recogiendo ciertos items. No faltará un clásico como la máquina que es capaz de regenerar nuestra salud y también encontraremos munición. Un aspecto original e interesante del juego es que al hacer daño a los demonios podemos dejarlos en un estado de mareo en el que los ejecutaremos si usamos un ataque cuerpo a cuerpo. Al hacer una ejecución recibiremos paquetes de salud, algo que tendremos que tener muy en cuenta cuando tengamos enfrentamientos masivos contra demonios si queremos sobrevivir.
Seguimos con las armas del personaje: en este caso iremos añadiendo nuevas al ir avanzando en nuestra aventura y, como a la antigua usanza, podemos llevar todas a mano siendo nuestro personaje un auténtico arsenal con patas. A esto hemos de sumar que cada arma puede ser mejorada con dos tipos de disparos especiales. Para ello deberemos localizar unos robots que nos dejarán adquirir una mejora para el arma que escojamos dentro de nuestro equipo. Dichos disparos secundarios se pueden activar en cualquier momento y al utilizarlos tienen un tiempo de recarga. Si tenemos los dos de un arma podemos escoger entre uno u otro pulsando el cursor de nuestro mando hacia arriba y así utilizar el que más nos convenga para cada situación.
Estos modos de disparo especial hacen más daño y suelen consumir mucha munición. Por último y lo más interesante, es que podemos mejorar los disparos especiales usando puntos de mejora de armamento que conseguiremos al derrotar enemigos y cumplir los desafíos que se nos proponen en cada nivel. Para conseguir la última mejora del armamento especial deberemos superar un reto especial que consistirá normalmente en acabar con un número de enemigos de una forma especial.
Terminando el apartado de armas debemos hablar de la motosierra, un arma especial que funciona con células de gasolina y que acabará con los enemigos de un solo ataque. Dependiendo del tamaño del demonio se gastará una cantidad de gasolina u otra. Acabar con los demonios de esta manera nos otorgará una cantidad de munición increíble, así que usarlo en el momento adecuado nos ayudará a rellenar la munición de nuestras mejores armas y puede significar la diferencia entre sobrevivir o morir a manos de una horda ingente de demonios.
Pasamos a la armadura, que en este caso también se puede mejorar en varios aspectos al conseguir unos chips especiales que encontraremos en unos soldados robot que normalmente suelen estar bien escondidos. También podemos mejorar permanentemente la cantidad de salud, escudo o munición al recoger unas bolas de energía especiales que son asimiladas por nuestra armadura.
Otro elemento rpg que encontraremos en el juego son las runas, que en este caso se consiguen tras superar una prueba especial que nos recordará a los portales Alfheim de Bayonetta. Al superar la prueba se nos da la runa que podemos equipar en nuestra armadura y nos ofrecerá ventajas para el combate. Las runas pueden mejorar sus prestaciones al usarlas y podemos aumentar los huecos para llevar más de una a la vez.
Por último mencionar que cuando entremos en una zona con un duro combate hay un item potenciador especial que podemos recoger y nos otorgará una habilidad especial por un pequeño periodo de tiempo que debemos aprovechar para facilitarnos un poco la vida. Dichos potenciadores pueden mejorar nuestra velocidad, aumentar el daño por cuatro o ponernos en modo Berseker, mi favorito personal que transforma a nuestro personaje en un ser invencible que ejecuta sin piedad a todo lo que se le ponga por delante.
Para movernos por los escenarios de Doom dispondremos de un mapa muy útil para guiarnos. Uno de los aspectos más importantes del juego es la exploración, ya que hay multitud de secretos en cada escenario que van desde datos sobre personajes y enemigos del juego a distintos muñecos del marine de Doom que desbloquearán mapas de los juegos clásicos para otros modos de juego.
El modo historia de Doom es sensacional, una explosión de adrenalina en la que se mezclan momentos de combate muy intensos con exploración en busca de secretos y algún que otro curioso puzzle que implica buscar una llave de acceso o plataformear como si no hubiera un mañana entre trampas mortales. Podremos ajustar la dificultad a nuestro gusto y disfrutar de una campaña larga y satisfactoria en la que podemos repetir cada capítulo para poder encontrar los secretos que nos hayamos dejado y en la que nos enfrentaremos a todo tipo de demonios infernales cuyo diseño en muchos casos homenajean a los clásicos de la saga.
Pero Doom no es solo su modo campaña, ya que está acompañado de dos modos aparte, uno para disfrutar de las clásicas partidas multijugador online y otro para crearnos nuestros propios mapas y compartirlos con la comunidad del juego.
El multijugador presenta varios modos de juego distintos para medirnos el lomo. Al contrario que en el modo campaña solo podemos llevar un set de dos armas predeterminado. En un principio tendremos tres sets disponibles pero al subir de nivel a nuestro personaje jugando partidas online desbloqueamos más sets de armas distintos. También podemos personalizar a nuestro personaje en su armadura, cambiando la forma y color de la misma. Otro aspecto que también podemos modificar son gestos para nuestro personaje. Metidos en combate nos encontraremos el clásico juego multijugador en el que al principio no pararemos de morir hasta enterarnos un poco de qué va el cotarro. No recuperaremos vida a no ser que la cojamos del suelo al igual que armadura para aguantar un poco más. En los mapas pueden haber armas especiales e incluso uno de los jugadores se puede transformar en demonio y liarla parda al usar los poderes de los mismos. Al principio solo tendremos un tipo de demonio en que convertirnos, pero al subir de nivel podemos desbloquear otras clases. Este es el aspecto más original y divertido de un multi que no inventa nada que no se haya visto pero que es realmente muy divertido.
Pasando al modo Snap Map, decir que es una herramienta para crearnos nuestros propios mapas de una manera sencilla pero a su vez con mucha profundidad. Con los «assets» del juego podemos crear un mapeado y luego retocar sus interiores a nuestro antojo colocando enemigos y objetos. Además podemos modificar IA de los enemigos, crear hordas o enfrentamientos contra jefes finales por poneros un ejemplo. Incluso añadiremos fuentes de luz y sonido a nuestro antojo. Para subir nuestras creaciones y las de la comunidad nos crearemos una cuenta de Doom para ello. Snap Map seguramente mostrará su potencial en un futuro y la idea de poder disfrutar de mapas creados por usuarios de todas las versiones del juego es todo un acierto.
A nivel técnico Doom es un juego excelente, 60 frames por segundo constantes en escenarios bien diseñados, variados y plagados de enemigos. Quizás no tenga un nivel de detalle tan alto como otros juegos pero es una auténtica delicia ver la suavidad con que fluye la acción. La música aparece normalmente en el momento en que combatimos a los demonios y suele ser muy cañera para dar más intensidad a los enfrentamientos.
Doom ha sido una auténtica sorpresa para mí. La acción es desbordante, los demonios te hostigan sin descanso y no puedes parar de moverte. Eliminarlos eficientemente, usar las ejecuciones para recuperar vida, la motosierra para recargar munición y los modos secundarios de las armas hacen que los tiroteos alcancen otra dimensión y disfrutes como un enano cada uno de ellos.
A esto hemos de sumar los momentos de plataformeo y exploración. Hacía mucho tiempo que no disfrutaba tanto deambulando por un escenario buscando secretos ocultos para mejorar a mi personaje.
Todo esto es solo el modo para un jugador, que para un servidor ya justifica la compra de Doom. Si encima añadimos el modo de creación de mapas Snap Map y el multijugador podemos hablar de un juego completísimo a todos los niveles y que os animo a probar.
Tentáculos Arriba:
- Tiroteos frenéticos, armas de todo tipo y color, ejecuciones, exploración, reto, elementos rpg, variedad de enemigos. Doom lo tiene todo a nivel jugable.
- El juego se mueve con una fluidez increíble.
- Completisimo en opciones.
- Traducido al castellano.
- Los guiños a los clásicos
Tentáculos Abajo:
- Más centrado en la acción no tiene la sensación de terror de Doom 3. Los enfrentamientos parecen estar predeterminados a ciertos escenarios y molaría que algún que otro demonio te diera algún sustillo.
- Cambiar entre el modo campaña, multijugador y Snap Map requiere de unas cargas largas y tediosas. En el caso del editor de mapas es comprensible, no tanto en el modo multijugador.
VERSIÓN ANALIZADA DE XBOX ONE, TAMBIÉN DISPONIBLE EN PLAYSTATION 4 Y PC.
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