Es una casualidad que en el día de hoy (el día del padre), podamos salir con los primeros análisis (primeras impresiones para nosotros, que queremos darle más mimo antes de dictar sentencia) de Ni No Kuni 2: Revenant Kingdom, un juego que en su primera entrega tuvo un fuerte vínculo madre-hijo y que en esta ocasión se repetirá, aunque lo veremos más en la mella que un padre puede dejar en su hijo muy «a la Final Fantasy XV style».
El próximo 23 de Marzo tendremos en las tiendas el juego de Level-5 y Bandai-Namco que en esta ocasión se desvincula del estudio Ghibli para la creación de escenas animadas, aunque por suerte vuelve a contar con una historia original del CEO de la compañía Akihiro Hino y de las estupendas melodías de Joe Hisaishi.
La salida de estudio Ghibli no será lo único que cambie, pues el sistema de combate ha sufrido infinidad de mejoras, fijándose más en sus «primos» dentro de la compañía y metiéndose en algo que en ocasiones nos recordará al sistema de combate de los Tales of.
En las escasas 10 horas que hemos podido probar el juego, hemos podido establecer un equipo de personajes que ya se perfila tan entrañable y carismático como el que pudimos ver no hace mucho en Xenoblade Chronicles 2 (a pesar del diseño de Rex), y creedme: después de probar casi todo rpg japonés (localizado) habido y por haber desde los 16/32 bits, se lo difícil que llega a ser conseguir eso.
La forma de narrar la historia no tiene tapujos, algo que contrasta con el estilo animado e incluso infantil de los diseños de personaje e incluso con toda la cantidad de criaturas que veremos en el juego. Además, arranca «en todo lo alto» con algunas cosas bastante interesantes, con lo que os recomiendo no ver ningún video de esos de «los primeros 10 minutos», si no queréis comeros unos pocos spoilers.
Como decía, el combate ha evolucionado, convirtiéndose en un action rpg al 100% en el que podremos atacar de forma suave con cuadrado, hacer ataques fuertes con triángulo y ataques a distancia con R1 e incluso saltar con circulo. combinando leves y fuertes haremos distintos tipos de combos que podremos rematar con ataques especiales, a los que accederemos con R2 y el botón asignado, consumiendo puntos mágicos con ello.
Además del combate normal, también tendremos unos tipos de combate más de pelotón que, aunque todavía no he podido explorar en profundidad, me han recordado un poco a Little King Story.
El colofón a las novedades lo pone algo que da titulo de forma indirecta al juego: Levantar nuestro reino de cero. Un poco avanzados en la historia comenzaremos a crear nuestro reino y, para ello, podremos ir construyendo diferentes tipos de edificios e invitando a NPCs a que se vengan a nuestro reino a vivir y trabajar, afectando todo esto directamente a nuestros personajes y pelotones de batalla.
Para los que ahora mismo os estéis preguntando «Donde están mis pokemons?», deciros que Ni No Kuni 2: Revenant Kingdom tiene un combate directo con los personajes y que han sacrificado un poco ese «Hazte con todos».
Y digo que lo ha sacrificado un poco por que aquí tendremos los Fofis (materializaciones de la energía) y podremos/tendremos que ir encontrando todos los que podamos (de una lista de 100) y equipándolos en función a lo que mejor se amolde a nuestro estilo de juego. Estos simpáticos bichitos harán que hagamos más daño, recuperemos vida o incluso se convertirán en un cañón que atacará a los enemigos.
En los primeros embites del juego nos enseñan a usarlos, pero sin duda se plantean como un factor de estrategia importante a la hora de enfrentarnos con bosses o enemigos legendarios que encontraremos por el mapamundi.
Técnicamente el juego se ve delicioso, aunque si que le he notado algún pequeño tironcillo al moverme en el mapeado, un mapeado (dicho sea de paso), que estará lleno de enemigos, enemigos especiales, cofres, zonas de recolección y lugares secretos…ideal para explorar!
Gráficamente es un lujazo ver este juego en movimiento y musicalmente parece que el señor Hisaishi ha aprendido de los errores de Ni No Kuni, haciendo que esta vez la melodía de combate no tenga un arranque lento y tedioso. Además, tener el tema principal del juego como música del mapa mundi hace que juguemos tarareando como tontos.
De momento el juego está dándome elementos nuevos y aportando frescura a su sistema, haciendo que cada enemigo que vea quiera eliminarlo en vez de esquivarlo. Si la fórmula funciona o no lo veremos cuando lleve 50 horas…y aunque pinta que va a ser así, para eso tendremos que esperar unos días!
En definitiva, Ni No Kuni 2, lejos de conformarse con seguir el legado del primer título ha querido redefinirse y mejorar todo, tanto lo que funcionaba como lo que no, y pese a que todavía me quedan muchas horas para hacer una valoración completa, no podría estar más contento con el producto que finalmente ha entrado en mi PS4…esperad pronto el análisis!
