Desde Pulpofrito, inauguramos una nueva sección llamada «Rankings«.
Con este nombre queda bastante claro lo que queremos hacer. Todos los colaboradores del blog, haremos un Top3 de diferentes temáticas.
Para empezar, hemos pensado que el mejor tema será consolas. El Top3 de las consolas de nuestra vida y el porque.
Además queremos dar la oportunidad de que si alguien quiere añadir su Top3 no dude en enviárnoslo y así lo añadiremos a la entrada en cuestión.
1. Super Nintendo
Si había una posición que tenía totalmente clara desde un principio, esa era la primera. Para mi, Super Nintendo, es sin duda alguna la mejor consola de la historia, sin que ninguna otra se le acerque.
El cerebro de la bestia irrumpio en nuestro mercado con muchisima fuerza. Uno de los motivos fue el video que regalaba Hobby Consolas por la epoca llamado «El cerebro de la bestia» el cual elevo el Hype (antes de que existiera) hasta cotas impensables por aquel entonces. Y que hizo que muchos cayeramos en los brazos de la 16 Bits de Nintendo.
Otra de las bazas de SNES fué sin duda un extensísimo catálogo, el cual estaba lleno de obras de arte hechas con pixels. Además de contar con el apoyo absoluto de las mejores desarrolladoras del momento.
Es muy muy complicado decir unos cuantos juegos y no dejar otros tantos fuera, pero voy a intentar nombrar solo 5 juegos.
- El juego con el que se vendia la consola, Super Mario World una vuelta de tuerca a la saga y su preciosa «secuela» Yoshi’s Island. O los Donkey Kong Country.
- Muchos Shoot’em up como por ejemplo Axelay, UN Squadron, R-Type o Super Aleste.
- Un catálogo de inicio espectacular con juegos como Street Fighter II, Super Contra III, Super Ghouls n’ Ghosts o Super Castlevania IV.
- Grandes RPGs como Final Fantasy VI, la saga Breath of Fire, Chrono Trigger o Bahamut Lagoon.
- Y muchos juegos de acción como Batman Returns, la saga Goemon, Demon’s Crest, Hagane, Rockman/Megaman o Actraiser.
2. PlayStation
Para mi, PlayStation es la heredera natural de Super Nintendo en cuanto a lo que a horas y vicio se refiere.
Con PlayStation, Sony se encumbró hasta lo más alto del podium videojueguil, y consiguió dominar los tres grandes mercados dejando en un segundísimo termino a sus directas competidoras, N64 y Sega Saturn. También fue la responsable del boom de las 3D, dando así una nueva perspectiva a los juegos (sobretodo de conducción y simuladores). Además fué la primer en comenzar a abrir el mundillo al público en general.
El catálogo de PlayStation estaba lleno de grandes joyas de todos los géneros. Clásicos ya de todos los géneros como:
- La consagración de Hideo Kojima y su Metal Gear Solid.
- RPGs de lujo como Final Fantasy VII, Final Fantasy Tactics, Vagrant Story, Suikoden o Xenogears.
- La eclosión de los Survivals Horrors con el debut de grandes sagas como Resident Evil o Silent Hill.
- Una vuelta de tuerca del clásico de Konami, Castlevania: Symphony of The Nights. Para muchos el mejor Castlevania de la historia.
- Juegos deportivos de la talla de la saga Winning Eleven (PES).
- O la apuesta por los juegos musicales como Parappa The Rapper, Bust a Move o la serie Bemani de Konami (Beatmania, Guitar Freaks, Drumania, etc).
3. Sega Saturn
En esta tercera posición, había muchisimos pretendientes y podría haber puesto PS2 o Dreamcast por ejemplo. Las cuales me han dado muchos y muy grandes momentos. Pero al final haciendo balance me he decidio por la injustamente tratada 32bits de Sega.
Sega Saturn tiene un extenso catálogo y de una gran calidad, pero tuvo la mala suerte de encontrarse con la explosión de Playstation y de su dominio absoluto del mercado global.
Del catálogo de Sega Saturn me gustaría destacar las primeras conversiones Pixel-Perfect de los juegos arcade de Capcom o SNK. Como por ejemplo todos los juegos Vs de Capcom de la época, todas las versiones de la saga The King Of Fighters o ese pedazo de Dungeons & Dragons: Collection o el Three Wonders.
Además hay que añadir unos cuantos exclusivos de una calidad innegable:
- La saga Panzer Dragon.
- Uno de los mejores shooters de la historia, Radiant Silvergun.
- Un Beat’m up de una altísima calidad como Guardian Heroes.
- Uno de los mejores juegos de Dragon Ball, el Shin Butoden.
- O esas joyas de Kojima, Policenauts y Snatcher (pena del idioma)
PD: Han quedado muchos juegos en el tintero, pero no queriamos hacer los comentarios eternos para su fácil lectura.
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1. MSX
Se que no es una consola propiamente dicho, pero en aquel entonces poco más que eso se podía hacer con ellos, así que me vais a permitir darle el primer puesto a mi querido MSX.
Y es que son muchos los recuerdos que tengo de el, no solo de grandes juegos, sino de mi padre cargándome las cintas por que yo era demasiado pequeño como para hacerlo aun (4 añitos), los vicios que nos pegábamos juntos, el ir a Carrefour con mis padres a hacer la compra y quedarme en la zona de los juegos mirando los que había, el paso de jugar en tv de blanco y negro a tv en color….los vicios al Emilio Butrageño con la canción de Oliver y Benji a toda pastilla…
Pero como bien digo, no solo de buenos recuerdos emocionales se gana el 1º puesto. Entre mis queridos juegos se encontraban Knightmare, Gradius, Salamander, Metal Gear, Knights of Camelot, Game Over, Atlantis, Abu Simbel, el maravilloso Penguin Adventure….
2. SNES
Nadie que sea de la generación de principios de los 80 podría saltarse la Snes como una de las favoritas. Con esta consola Nintendo fue puro amor y además hizo una de las publicidades más graciosas y a cuchillo que recuerdo en este mundillo, el Slogan de Donkey Kong Country en las míticas revistas era «Mientras otros SE GAnan la vida haciendo el mono…».
Sería imposible hacer un listado de los mejores juegos sin cambiarlos cada 5 minutos, pero para mi Super Mario World, Donkey Kong Country, los Dragon ball Super Butoden, la conversión de los Art of Fighting, el Whirlo, Super Ghouls’n ghosts, Super castlevania 4 y 5, Axelay, UN Squadron….y por supuesto los RPGs: A link to the Past, Super Mario RPG, chrono trigger, Illusion of time, Tenchi Sozo/Terranigma, Chrono Trigger, Seiken Densetsu…
3. PS2
La decisión del 3º puesto estaba muy reñida entre PS1 y PS2. El motivo que me ha hecho decantarme es que PS1 llegó en esa época de estudiante en que ya eres grandecito como para que tus padres te compren los juegos, pero demasiado joven como para estar trabajando, entonces recurrí al camino facil: ponerle un chip. Con PS2, sin embargo, pasados un par de años de su ciclo de vida mi nivel monetario empezó a recibir ingresos y me convertí en lo que soy a día de hoy: Coleccionista.
Continuaciones de sagas míticas nacidas en PS1 (silent hill, Resident evil, rpg’s a tutiplen) la llegada de Kratos y nuevas licencias…Si, se merece ese 3º puesto!
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1. Dream Cast
Desde el día en que vi imágenes del primer Shenmue, decidí que Dream Cast sería mi siguiente adquisición después de la Play Station de Sony.
Fue mi primera consola de Sega y estuve muy contento con ella desde el primer día de su compra. En su tiempo fue la única que pudo con los Street Fighter III y entre sus buenos juegos tenía el Resident Evil Code Veronica (y su versión Complete o X en Japón que aquí solo vimos para PS2), Dead or Alive 2 (que se veía mejor que en PS2) y los entretenidísimos Space Channel 5 y Jet Set RadioOooOOo.
A parte de Shenmue y Shenmue II que a día de hoy aún me siguen sorprendiendo mucho por su apartado técnico y por sus detalles, pudimos disfrutar del que sería el primer RPG online para una videoconsola, juego al que le eché muchas horas. Estoy hablando de Phantasy Star Online un juego que realmente enganchaba y que disfrutabas jugando con otros jugadores del resto del mundo (no estaba limitado por región), y que encima era GRATIS.
Una de sus grandes limitaciones fue el GD-Rom, y es que, ¿si Shenmue II ya necesitó utilizar 4 de estos discos de 1 Giga de capacidad, cuantos hubiese necesitado utilizar su tercera parte?
No, no fue eso lo que acabó con esta consola, sino el poco soporte que tuvo de las desarrolladoras, pero sobretodo me jodió ver como fue SEGA la primera compañía en dejarla de lado, algo que cuando sucedió no podía llegar a creer.
Aunque bueno, la consola no es que esté del todo muerta, para muchos todavía sigue viva y para algunas compañías también, ya que a día de hoy y de vez en cuando sale algún shoot’em up para ella.
Sigo pensando que la consola tenía un gran potencial, y que si se hubiese continuado con ella se podrían haber sacado juegos con mejores gráficos, muestra de ello fue el disco que nos venía con la primera entrega de Shenmue llamado Shenmue Passport y donde podíamos ver a los personajes del juego en todo su esplendor con un modelado muy superior al del juego.
2. Super Nintendo
Realmente fue el «cerebro de la bestia» y quizás, junto a Play Station y Play Station 2 sea a la que más horas de vicio le he pegado.
El porque la he situado en segunda posición es porque los juegos que más disfruté y los que sigo considerando los mejores juegos de la consola son los que salieron en sus inicios en tierras Europeas y son los que más recuerdo. Y es que, mientras que la consola nos llegaba a nosotros, yo les enseñaba revistas japonesas a los compañeros de clase del instituto con imágenes de los juegos que nos estábamos perdiendo. Esa consola se llamaba Super Famicom.
No nos pudimos quejar cuando llegó, ya que en su caja nos venía incluido el entretenidísimo Super mario World, además de que podíamos comprar otras joyas como las geniales aventuras del cazavampiros Simon Belmont en Super Castlevania IV, o las de Sir Arthur en Super Ghouls’n Ghosts, además de los otros que ya han comentado los compañeros.
En realidad, si se compara con la Mega Drive, aunque las dos máquinas contasen con diferentes títulos, salvo alguna excepción, tampoco estaban mal los de la consola de SEGA, ya que también habían verdaderas joyas que no tenía Super Nintendo y viceversa. Por ejemplo uno de los juegos que más disfruté en la consola de Nintendo fue con Cybernator de NCS Masiya, aunque disfruté todavía más con su versión japonesa y sin censura, Assault Suits Valken.
Quizás una de las cosas que más destacó de Super Nintendo fue su paleta de colores superior a la de su rival, sus canales de sonido también superiores, su impresionante modo 7, su mando de seis botones (más Select y Start) y una cruceta perfecta para los juegos de lucha y los distintos chips con los que cada vez nos sorprendían más. Como el FX con el que disfrutamos del genial Star Wing y su maravillosa música o el viciante Stunt FX. También el cartucho especial en el que consiguieron meter comprimido el Super Mario RPG los chicos de Squaresoft.
Fue una lástima que Nintendo la cagase en un par de cosas, como fue solicitar a Sony la creación del CD-Rom para su consola y a espaldas de esta también hacerlo a Philips o su pelea con Squaresoft, lo que supuso que la aparición de Final Fantasy VII pasase de ser un juego de Nintendo 64 a uno de PSX y que sus últimos juegos para la Gran N saliesen solo en Japón y algunos a duras penas en América.
3. Play Station
Tenía un dilema entre comprarme una Nintendo 64 o comprarme la consola de Sony. La Nintendo 64 por mucho que enseñara no me acababa de convencer, todos los juegos me parecían iguales, podían llamarse Zelda: Ocarina of Time, Mario 64 o Donkey Kong 64, que la fiebre 3D había pegado fuerte en la consola de Nintendo y esos serían el tipo de juegos que nos ofrecerían.
Después de tantear el terreno y probar el primer Resident Evil, y el juego que aquel año desbancó al Survival Horror de CAPCOM, Tomb Raider, decidí hacerme con la nueva consola de Sony.
Revistas y revistas mostrando imágenes del siguiente juego del estudio japonés CAPCOM, Resident Evil 2, con la invasión zombie en una gran ciudad llamada Raccoon City llena de rascacielos, una comisaría con zombies de toda clase, sala de tiro, una chica llamada Elza Walker embutida en un traje de motorista de color rojo y blanco y un pringado llamado Leon S.Kennedy como protagonistas…
Fue la misma semana en la que salió esa segunda parte de esa conocida saga de zombies, que me compré la «plei«, y así poder disfrutar del mejor Resident Evil que se ha hecho hasta el momento. No era lo que había visto en las revistas, pero me daba igual, el juego molaba.
Durante su larga vida la PSX ha tenido muy buenos juegos, y otros que verdaderamente pueden considerarse basura. Ha sido una consola con un gran catálogo de juegos para todos los gustos.
En ella disfrute de RPG‘s, como Final Fantasy VII y VIII, Chrono Cross (pedazo de diseños de Nobuteru Yuuki), Legend of Dragoon, Xenogears o las dos entregas de Parasite Eve. Juegos de terror como los Resident Evil 1, 2 y 3, Dino Crisis 1 y 2, Silent Hill, Galerians o de aventuras como el genial Metal Gear Solid y hasta incluso de aviones con el inicio de la saga Ace Combat y la que fue su mejor entrega en 32bits, Ace Combat 3 Electrosphere en su versión japonesa.
Está claro que hay más consolas y que da igual de cual se trate, si hubiese tenido una Master System, Megadrive o cualquier otra, seguro que hubiese disfrutado igual con sus juegos.
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1. PlayStation
La original y la culpable de que mis mejores recuerdos de la industria sean los pasados frente a ella con sus maravillosos juegos, sagas inolvidables a las que vi nacer y que nunca fueron superadas por mucho que se empeñen desde entonces, y nunca lo serán.
Esta consola me costó muchas tardes de recapacitación, no en vano salía a la vez que la Nintendo 64 y la SEGA Saturn, dos consolas pertenecientes a compañías de prestigio que venían apretando fuerte, con unas campañas de publicidad para quitar el hipo. La industria se había hecho fuerte y empezaba a generar pingues beneficios, cosa que Sony no tardó en ver y se lanzó con todo lo que tenía, proponiendo lo que aún hoy es su lema más conocido «la consola como centro multimedia». La Playstation era una consola que apostaba por el lector de CD como soporte para reproducir sus juegos por su gran capacidad, pero que también reproduciría música para escuchar cuando soltaramos el mando. Era tal su apuesta, que existía la opción de poner los juegos en la consola para simplemente reproducir las pistas de audio, gracias a lo que descubrimos que ese apartado también se cuidaba mucho por entonces.
Los juegos fueron sin duda lo mejor de la consola ya que, lejos de basarse únicamente en la calidad gráfica, Sony acogió franquicias rompedoras que empezaban y que después se convirtieron en los Titanes que son hoy, sagas como Tekken, Gran Turismo, Resident Evil o la saga Grand Thef Auto, pero también supieron ver cómo aprovechar las oportunidades que otros descartaban como cuando se hicieron con los derechos del juego de Square; Final Fantasy VII y sus predecesores hasta completar la trilogía de PSX, y entre todos hicieron a Sony alcanzar cotas de ventas que nunca hubieran imaginado.
2. Sega Megadrive
Merecidísimo para Megadrive, una consola mítica con juegos memorables y el factor nostalgia a su favor gracias a lo cual ha conseguido que SEGA signifique mucho más para mí que ninguna otra compañía de videojuegos, aunque no fuera suficiente como para seguir comprando sus máquinas.
Yo me declaro seguidor de Megadrive, esa consola nos la regalaron cuando tenía catorce años, practicamente nada más salir, y fue la que elegimos mi hermano y yo por ser la que más juegos tenía para jugar a dobles, porque para mí los videojuegos no significan nada si no puedo compartilos con alguien, y ese alguien ha sido mi hermano durante muchos años. La Megadrive tuvo muchísimos juegos y todos muy buenos (Altered Beast, Shinobi, Columns, todos los Sonic, etc) pero lo más importante de todo es que se atrevió a innovar, a apostar por juegos no muy populares, pero de una calidad insuperable, como Ecco the Dolphin. De esa época recuerdo a uno de mis juegos favoritos de todos los tiempos Flashback, un juego futurista en el que interpretabas el papel de un hombre que había perdido la memoria y que tenía que avanzar por escenarios superdetallados y coloristas en clave de plataformas interactuando con distintos personajes y superando diversas pruebas, todo ello amenizado con secuencias de video que servían de puente entre fases, y para mí fue una auténtica maravilla visual y jugable que revolucionó la forma de hacer videojuegos.
3. Game & Watch
Máquinas incombustibles que aún hoy pueden ofrecer muchas horas de diversión a todo aquel que se atreva a provarlas, gracias a su sencillo control y grandísimo poder de adicción. Premisas de las que las actuales compañías del sector deberían tomar buena nota si quieren que esto no se convierta en una industria decadente que avance solo por inercia.
Las Game & Watch las conocí con escasos 10 años, durante los cuales e incluso después llenaron mis tardes y mis vacaciones con sus pantallas con fondos predibujados y secuencias predefinidas en las que tenías que demostrar tu habilidad frente a monos que te tiraban barriles (¿Alguien dijo Donkey Kong?), ninjas escondidos en árboles lanzando surikens, o robots manejando pelotas como el mejor de los malabaristas. Fueron la prehistoria de las consolas portátiles a las que se les debe mucho y en las que casi nadie repara nunca pero que no desmerecen en nada a la industria, sino todo lo contrario, ya que aún hoy son capaces de aportar horas y horas de diversión a cualquiera de nosotros.
